El delito de pornografía infantil

El delito de pornografía infantil se contempla artículo 189 del Código Penal. Dentro de la norma, se alude como delito cualquier abuso a menores de edad, prostitución y explotación sexual. De acuerdo con esto, quien tenga o distribuya material pornográfico infantil concurre en la tipificación de delito de pornografía infantil.

Las organizaciones y expertos en la materia, resaltan las nuevas modalidades en cuanto a la pornografía infantil. Este mundo deja estadísticas alarmantes. Actualmente, según, Internet Watch Foundation (IWF), cada 7 minutos se reproduce en Internet contenido de abuso sexual hacia un menor.

Este acto delictivo se basa en el uso de personas con necesidades de protección especial o menores de edad. La finalidad de la pornografía infantil es la ejecución de acciones sexuales emuladas o reales para su posterior exhibición por medio de fotos o vídeos.

Pornografía infantil: uno de los delitos más crecientes

El delito de pornografía infantil ha crecido mucho en los últimos tiempos. Un informe de la IWF de nombre Trends in Online Child Sexual Exploitation: Examining the Distribution of Captures of Live-streamed Child Sexual Abuse destacó que la mayoría de material pornográfico de abuso infantil se trasmite en directo.

Otro dato relevante que arroja la investigación es que el 98% del contenido encontrado es de niños menores de 13 años, de hecho, la víctima de menor edad tenía 3 años. Estos niños no tienen conciencia de que están siendo grabados. Incluso, es posible encontrar material de niños bailando sexualmente sin el conocimiento de sus padres o cuidadores.

Otra forma de contacto que se populariza cada vez más son algunos juegos en línea. Desde 2011 la IWF ha detectado diferentes códigos que usan los pedófilos que hacen vida en estas plataformas para acceder a contenido exclusivo.

¿Cuál es el perfil del consumidor de pornografía infantil?

De acuerdo con las últimas investigaciones, el consumo de material pornográfico infantil es cada vez mayor, siendo más relevante en personas con tendencia al abuso sexual de menores. Diferentes investigaciones coinciden en que no existe un perfil específico para los agresores sexuales infantiles, pues cada uno responde a características distintas.

Si bien es cierto que hay una relación entre ver pornografía infantil y sentir atracción sexual hacia menores de edad, existen la posibilidad de establecer dos tipos de consumidores:

• Consumidores exclusivos: dentro de este grupo, se encuentra el consumidor de accede a pornografía infantil por el mero hecho de su atracción sexual por menores de edad.
• Consumidores curiosos: por lo general, este perfil obedece a consumidores que no se sienten atraídos sexualmente por menores de edad, pero buscan un estímulo sexual infrecuente.

Sin duda, el grupo de mayor predominancia en cuanto al consumo de este material, son los pedófilos, así como los que se dedican al intercambio de este tipo de contenido.

Otro punto a tener presente es que dentro de los perfiles de consumidores, también existen quienes son selectivos con respecto al material. Por ejemplo, hay quienes se inclinan por edad, género y actividad sexual específica.

El consumo de material pornográfico infantil ocurre por medio de sistemas tradicionales de intercambio, deep web y hasta redes sociales como Facebook, WhatsApp o Telegram. Dentro de estas aplicaciones, hay grupos exclusivos en los que los miembros cuelgan contenido pornográfico.

Sin embargo, existen nuevas herramientas de captación y distribución de material pornográfico, según destacan expertos en el tema. Actualmente, existen riesgos potenciales en videoconferencias, lo que resulta cada vez más fácil y accesible.

Definición del delito de pornografía infantil

El concepto de pornografía infantil se recoge en el Capítulo V del artículo 189 del Código Penal. Específicamente, en los delitos de prostitución, corrupción de menores de edad y explotación sexual.

En base a lo establecido en la ley, se define como pornografía infantil todo material en que se expongan conductas sexuales reales o ficticias de menores de edad o personas con discapacidad. De acuerdo con lo dispuesto en el artículo 189 del Código Penal, la pornografía infantil responde a:

• Cualquier contenido visual que muestre actos sexuales reales, explícitos o emulados de menores de edad o personas discapacitadas.
• Todo tipo de representación de órganos genitales de menores de edad o personas discapacitadas con finalidad sexual.
• Material de cualquier índole que represente visualmente a una persona que simule a un menor de edad siendo partícipe de actos sexualmente explícitos, tanto reales como simulados.
• Imágenes reales de un menor de edad de genitales o actos sexuales llevados a cabo por un menor de edad.

¿Cuáles son los delitos de pornografía infantil?

Los expertos de la Convención sobre los Derechos del Niño, señalan que la pobreza mundial es un factor clave que promueve el delito de pornografía infantil, así como la prostitución y la trata de menores. En el caso específico de la pornografía infantil, la finalidad es diversas y entre sus elementos comunes destacan:

El Código Penal Español es muy claro con respecto a los delitos de pornografía infantil que pueden ser penados:

Posesión de pornografía infantil

La ley sanciona con pena de cárcel o multa a quienes adquieran o tengan en su poder material pornográfico infantil para consumo personal. Asimismo, a quienes obtienen este contenido con dolo por medio de cualquier tecnología. Ahora bien, para que concurra el delito debe pornografía infantil deben darse las siguientes circunstancias:

• Tener en posesión material pornográfico de menores de edad o personas con discapacidad.
• Dicho material debe ser usado con fines personales.
• El individuo debe estar consciente de que tiene en poder material pornográfico infantil.

En el supuesto de que se cumplan las condiciones descritas, el Código Penal resalta penas privativas de libertad de 3 meses a 1 año y multa de 6 meses a 2 años. Por otro lado, la ley sanciona a padres o tutores que estén al tanto del delito. En el caso de omisión, la pena va desde 3 a 6 meses o multas de 6 a 12 meses.

De igual modo, el Ministerio Fiscal tiene potestad para iniciar acciones a fin de retirar la tutela o patria potestad de los menores víctimas del delito de pornografía infantil.

Distribución de pornografía infantil

Este delito de pornografía infantil se expone en el artículo 189.1b del Código Penal. Las acciones que se admiten en este delito son la producción, difusión, venta, ofrecimiento o exhibición de estos actos o la tenencia con fines pornográficos.

La conceptualización de este delito resguarda la inmunidad de los menores de edad en su pleno desarrollo emocional y personal. De acuerdo con la norma, los actos de distribución son dolosos, por lo que hay pena de prisión de hasta 9 años.

Penas por delito de pornografía infantil

Las penas en caso de delito infantil son la prisión o multa. Según la ley vigente son:

Pena de 1 a 5 años de prisión en el supuesto de:

Producción, utilización, captación, exhibición, venta u ofrecimiento de archivos de pornografía infantil. Dentro de esta pena, se incluye además, a cualquier persona que reciba o aporte dinero en función de dicho delito. Esta pena se establece en el artículo 189.1a y 1b del Código Penal.

En el supuesto de que estos actos conllevan a circunstancias de mayor gravedad, se impone una pena mayor. Por ejemplo, si el autor es miembro de una organización dedicada a estas actividades o se trata de reincidencia. En estos casos, la pena va desde los 5 a 9 años, según el artículo 189.2 del Código Penal.

Otros supuestos:

• Quienes acudan a eventos con fines pornográficos en los que participen menores de edad, son castigados con penas de 6 meses a 2 años.
• Cualquier individuo que posea o acceda a material pornográfico infantil por medio de las tecnologías de la información y la comunicación será sancionado. En este contexto, se aplica multa de 6 meses a 2 años o prisión de 3 meses a 1 año.

¿Cuándo concurre un delito de pornografía infantil grave?

En los supuestos en que la ley considera un delito de pornografía infantil grave, siempre se aplica la pena de prisión, dejando de lado la multa. Estos casos son:

• Actos de violencia sexual o física en que peligre la integridad física del menor de edad.
• Cuando el delito se produce como consecuencia de una postura de confianza, autoridad o superioridad.
• En el caso de que se utilice a un menor de 16 años.
• Si el autor del material pornográfico forma parte de organizaciones dedicadas a este fin.
• Para cualquier de estos dos escenarios, el Código Penal impone una pena de prisión de 5 a 9 años.

Atenuación de penas por causas mentales

En el Código Penal se destaca la posibilidad de atenuación de penas cuando se comprueba que una persona presenta un déficit mental que le impide comprender la ilicitud de sus actos.

No obstante, la jurisprudencia ha establecido lo que se conoce como “criterio mixto” dejando claro que la sola existencia de una anomalía no implica la exoneración de la responsabilidad delictiva. Por ello, deben darse otras circunstancias:

• La falta de capacidad mental de una persona para entender la ilegalidad de sus acciones.
• La vinculación entre su incapacidad mental  y su afectación psíquica con el delito llevado a cabo.